El balonmano de Valparaíso se ha transformado en una fuerza histórica para el deporte, de larga, intensa y meritoria trayectoria, de éxitos en competencia que han hecho y hacen vibrar al Valparaíso de los verdaderos amantes del balonmano. De una afición fiel y plural que hace sentir sus colores y proyecta en cada definición a nuestra ciudad. No solo por medio de competencias y éxitos deportivos, sino que también gracias al esfuerzo constante y a veces anónimo de muchos dirigentes y amigos del balonmano, los cuales han hecho crecer exponencialmente nuestro deporte.
Varias generaciones de jugadores y familiares han sabido conocer el deporte y, por lo tanto, se ha conformado una comunidad que abarca desde colegios y universidades hasta clubes.
La riqueza social que cada uno de estos factores ha generado en nuestra ciudad permite ir constituyendo una comunidad en torno al deporte y, por ende, evolucionando a logros consecutivos a nivel regional y nacional en las distintas categorías. Asimismo, estos logros son reconocidos por las distintas entidades de nuestra ciudad que promueven y practican el balonmano.
En “el Inter”, la práctica del balonmano comenzó en el año 1988 siendo el punto de partida cuando en actividad académica les presenté el deporte de manera recreativa a los alumnos. Fueron ellos mismos los que apresuradamente solicitaron generar competencia, siendo en esos años los colegios que partían con el deporte el Colegio Luterano de Valparaíso y el Colegio Alemán, junto con nosotros “el Inter”. Desde entonces, múltiples generaciones de mis alumnos se han ido empapando del deporte y con esto hemos ido creciendo como institución y desarrollando una historia que va desde torneos locales a nacionales, incluyendo con ello, la constante alegría de ver a nuestros jugadores llegando a las Selecciones Regionales y
Nacionales. Creemos que una cosa caracteriza el espíritu del Inter yes que desde los primeros años se ha creado la tradición espontánea
que nuestros jugadores mayores dedican su tiempo a entrenar ajugadores de las categorías inferiores, siendo esto un gran aporte que
se transforma en un referente para los jugadores de nuestra cantera,lo que permite reforzar ante todo, la idea de deporte colectivo y de
comunidad.
Nacionales. Creemos que una cosa caracteriza el espíritu del Inter yes que desde los primeros años se ha creado la tradición espontánea
que nuestros jugadores mayores dedican su tiempo a entrenar ajugadores de las categorías inferiores, siendo esto un gran aporte que
se transforma en un referente para los jugadores de nuestra cantera,lo que permite reforzar ante todo, la idea de deporte colectivo y de
comunidad.
