Cuando nos habituamos a una rutina corremos el riesgo de quedarnos atrapados en ella para siempre. Para que esto no suceda, Nescafé invita a las personas a que aprovechen los pequeños momentos y se atrevan a sacarle provecho a las oportunidades.

Para comunicar este mensaje, utilizamos un recurso que transmitiera la forma en la que nos quedamos estancados en el día a día y que nos sirviera para invitar a las personas a salir de ella con la mejor forma de empezar algo nuevo: un Nescafé.

En punto de venta invitaremos a las personas a que hagan una pausa para disfrutar de un Nescafé. Esta exhibición contará con una máquina dispensadora que entregará una taza de café a quienes quieran tomarla. Cuando las personas se acerquen a servirla, un tubo con la forma del infinito se llenará con la bebida. Esta acción hará que varios mensajes con actividades diarias se oculten, para mostrar otro que los invita a renovarse.

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