Entre( )paréntesis
Lo que hace un espacio habitable no es precisamente las paredes y la tabiquería que definen una habitación, sino el área que estás enmarcan en donde nos permitimos existir y ser. Incluso deambular de un lado al otro se ha hecho complicado desde que es la inercia lo único que motiva el movimiento.
pienso,
busco,
divago,
dejo,
retomo,
y vuelvo a dejar,
con cierto desdén miro a mi alrededor con la decepción de no haberte encontrado. No había entendido que cohabitar es una actividad que a veces solo involucra a uno mismo. Tengo esta necesidad incesante de encontrarte, pues hace mucho que no estás y no hallo las razones de tu pérdida. Como si fuese el reflejo infinito de un espejo frente al otro, estoy evocando tu presencia una y otra vez sin saber si la real está aquí, sin embargo, algo me dice que tampoco estás afuera.
No sé en dónde estés
pero me gusta pensar que estás
justo ahí
al estirar el brazo
donde mi memoria te acaricia
y mi corazón te alcanza
y entonces,
te siento cerca
sin conjugarte en pasado
no hay banalidad que llene la horma de tu ausencia.
El 13 de marzo de 2020 fueron reportados los primeros casos confirmados de COVID-19 en Venezuela, posteriormente, el 17 de marzo se habrían suspendido las actividades en distintos niveles decretando cuarentena obligatoria como mecanismo de respuesta ante la emergencia sanitaria con la que amenaza dicho virus, que habría sido declarado pandemia por la OMS días antes de los primeros brotes en el país. Desde entonces el contacto humano se redujo a vernos en la distancia a través de una pantalla o escuchándonos por teléfono.
En consecuencia, nos planteamos nuevas dinámicas y maneras de acercarnos al espacio del otro para sentirnos en compañía, e incluso, desarrollamos nuevos métodos de escapismo en la búsqueda de poder coexistir con la única persona que está en la habitación: nosotros mismos.
La búsqueda hacia el reencuentro.
Estas fotografías han sido realizadas a través de videollamadas por la aplicación Zoom entre abril y mayo del 2020.
Agradecimientos a Juan Tufano, Samuel Mariña y Aldo Rapino.
Desde Venezuela.
Textos y fotografías por Yanna Parra
