La isla de los inventos (Rosario) es un lugar donde pueden asistir tanto niños como adultos, es un espacio de recreación para aprender jugando.

La Isla no es un centro cultural, una biblioteca, un taller de plástica o un club. No obstante, allí las chicas y los chicos juegan, trepan, leen, escriben, dibujan, colorean, fabrican objetos, se disfrazan, miran, piensan, preguntan, responden y, haciendo honor al nombre del lugar, inventan. Y los adultos, mientras tanto, los acompañan, miran, cuidan, retan y, si tienen ganas, también pueden ponerse a jugar. Para que todo esto suceda, este lugar espera a sus visitantes con muestras itinerantes y visitas guiadas. 

 

El diseño que se propone en este proyecto surge de que la isla se divide en distintas "fabricas" a estos sectores le corresponde a cada uno, un color por el que está compuesto el isotipo, que es una "rueda" (representando uno de los primeros inventos), formada por triángulos de distintos tamaños y colores; representando cada uno de los sectores que mencionamos anteriormente.