¿Viste como en los grupos de pibes si hay uno q es corpulento puede aparecer como el gracioso del grupo? Es decir si bien nos tiran todo el tiempo imágenes de varones trabajados y formados, en la cultura masculina hay un estereotipo para que los "gorditos" se identifiquen. Es decir que si no podes bajar de peso bueno, tenemos también un estereotipo para que te sientas cómodo. Es bastante cruel en mi opinión como si varón y gordo está todo bien. La famosa "pancita sexy". En cambio las mujeres no tienen ese privilegio. A mí desde chico no me cabía ningún estereotipo para estar en un grupo de varones. En parte porque siempre fui muy introvertido.

A los 12 o 13 empecé a sentir mucha vergüenza porque yo tuve sobrepeso hasta los 24. Y a esa edad antes de la adolescencia, mi imagen corporal no tenía nada de sexualizado aun. Yo solo quería meterme en la pileta como mis compañeros pero la verdad me daba mucha vergüenza. Yo no me mostraba. Al momento que me di cuenta que yo era gordito y los demás no, escondí mi cuerpo. Usaba buzo en verano. A esa edad el cuerpo empieza a cambiar entonces también se me suma no entender todos los cambios que suceden, el vello, la barba, etc. Bueno esto fue la pre adolescencia.

Ya a los 15 me di cuenta que me gustaban los varones a mí. Es algo que yo transite solo y sin contárselo a nadie así que mi refugio era internet. Me doy cuenta el tipo de chicos que me gustaban. Los flaquitos, los que tenían el flequillo largo, onda twinks. Eso me demolió bastante porque me miraba al espejo y veía lo lejos que estaba de eso. Para mí no eran solo chicos que me gustaban sino chicos que yo quería parecerme.  En los varones está el gordito gracioso, pero lamentablemente para los que son gays el estereotipo es otro. El varón gay que nos venden no es gordo, es o flaco y loca, o ultra metrosexual trabado. Por lo tanto yo no encajaba en ninguno, en mi cabeza lo único que había era esa admiración y esas ganas de los chicos flacos. Así que para mí, mi ideal de belleza masculina se empezaba a acercar a la delgadez extrema.

A los 17 por primera vez deje de comer, unos meses antes de Bariloche. Mas porque iba un chico que me re gustaba y yo quería estar con él. Y yo sabía, porque él era muy superficial, que solo me daría bola si bajaba de peso. Lo hice y llegue bastante delgado a Bariloche. Por primera vez ponele me compraba chupines y esas cosas y me gustaba. Pero termine la secundaria y entre en una depresión bastante grande que siguió hasta los 24. La cuestión es que me había anotado en el IUNA pero yo cursaba 1 o 2 materias por cuatrimestre. La mayor parte de mi tiempo la pasaba en mi casa, no salía nada. Entonces, estando solo deje de preocuparme por mi cuerpo. Como que al momento de no tener que ver a nadie no necesitaba cuidarme ni dejar de comer. Me negué muchísimo la posibilidad de estar con alguien.

Pasaba mucho tiempo en la pc y terminé entrando en una relación virtual completamente toxica. Si yo salía poco, con esto conocí a un tipo al cual le dedique cuatro años de mi vida. Él tenía obesidad y yo para ese momento necesitaba hablar con alguien, mescucho bastante. Pero el tema es que yo quise ayudarlo a que baje el de peso porque estaba muy muy mal, es decir su salud ya estaba re comprometida. Pero él decia que estaba feliz así y  me empezo a arrastrar a eso él, empecé a alejarme muchísimo de mi idea original de los chicos que me gustaban y empecé a abrazarme mucho a la comida. Tomé y adapte muchas actitudes de él. Para mí, mi imagen siempre se definió en parecerme a otro. Y por todo el tiempo que a él yo lo veía como modelo, yo estaba bien. Me olvide de lo que eran los chicos q me gustaban antes, me negué la posibilidad de otra imagen corporal que no sea la suya. La cuestión es q todas mis inseguridades se reprimían por él.

En un momento, empecé a cursar unas materias que me hicieron hacer clic. Algo en esas materias me despertaron ganas de salir de mi casa, de vivir encerrado empecé a cursar más materias y a hablarme un poco mas con los demás. Entonces cerca del verano pasa algo que me retrae a cuando yo tenía 13 años: dicen de juntarnos en una pileta, me quedé congelado. Me agarró terror y ese mismo día dejé de comer.

Nunca me recuperé. En ese momento se empezó a morir el vínculo con ese tipo. Antes verme al espejo y verme parecido a él me hacía bien, ahora solo me daba terror y asco. Terminé desarrollando anorexia nerviosa y bajé de 85 kilos a 53. Se me empezó a caer el pelo y me caí un par de veces, la cara se me chupó y me hice mierda.  La cuestión es que a medida que me refugiaba en la anorexia mas me costaba contarlo.  En mi momento de más estar hundido fui a la nutricionista. Ver que se me cayó el pelo por la pérdida de peso fue darme cuenta de que tenía un problema serio. Después se me empezaron a notar muchísimo los huesos de la cara. Esos signos y conocer a mi actual novio fueron una señal de alto.

Yo ahora estoy feliz con mi cuerpo y de a poco se fue curando, mi cara se arregló, no se me cayó más el pelo. Hoy por hoy convivo con los trastornos alimenticios, me cuesta comer más de una porción. En estos dos años de 53 pase a 57 kilos, ya no subo ni bajo. Como algo positivo, empezar a cocinar mi propia comida me ayudo a volverme consciente de lo que como y me hace más fácil comer. Tengo recaídas pero ya no bajo más, la anorexia masculina es algo de lo que se habla poco. Para mí la anorexia tiene componentes de autoflagelación, hace que en un momento te duela y con eso bueno, decís “por lo menos estoy vivo”. Pero después te sentís miserable. Tenía miedo de pensar hasta donde podría haber llegado si seguía así. Pero ya está, aprendí a convivir con la anorexia. El amor me ayudó muchísimo.