Trash the Dress
Una vez que pasó la boda, cuando ya no están los nervios al máximo ni se tiene la presión del tiempo por apegarse a un itinerario podemos hacer con la pareja una sesión donde se sientan libres de divertirse sin cuidar que no se ensucie el vestido, es una gran oportunidad para demostrar su lado más aventurero y así darle vida una vez más al vestido de boda.