La camaña "Raro es raro" se conceptualizó con el propósito de brindar herramientas a los colaboradores de la empresa farmacéutica Zuoz Pharma, para el abordaje de situaciones de inseguridad personal.
La campaña buscó estimular la asistencia a una serie de talleres de prevención del delito, a través del humor.
A modo de caldeamiento, se desarrolló una campaña de intriga a través del envío de correos electrónicos con piezas que advertían a la audiencia de la experiencia.
Como producto final, cada colaborador recibió un manual y un video con las recomendaciones de los expertos en materia de seguridad personal.