EL FIN DEL ARTE
Sito en la plaza de la Ajedrea en las inmediaciones de la EstaciĆ³n de Autobuses, el mural ha sido impulsado por el colectivo PEL, y desarrollado desde la autogestiĆ³n por los artistas Isaac Mahow y Mr. Trazo, como autores de la obra, enlazando dos visiones del Arte bajo un mismo tĆtulo de ambiguo significado.
El objeto o motivo con que se ejecuta un mural en la calle, debiera manifestar un mensaje visual o concepto mĆ”s allĆ” de la mera estampa grĆ”fica o decoraciĆ³n estĆ©tica sobre un edificio. AsĆ, El Fin del Arte cuestiona cual debiera ser este objetivo y se establece como una sublevaciĆ³n y arma de defensa frente a las adversidades que agreden al Arte y a su Historia, asĆ como a las que ataƱen a sus artistas creadores y compatriotas. Por consiguiente el fin del arte reside en nuestra propia realidad como creadores, la cual manifestamos frente a un mundo tergiversado, contribuyendo asĆ a escribir la historia de nuestra Ć©poca.
Oculta tras una mĆ”scara, o fragmento, del Arte ContemporĆ”neo, de la Historia y del Patrimonio se encuentran las instituciones gubernamentales y grandes compaƱĆas que promocionan una serie de programas culturales cuyas manifestaciones de carĆ”cter elitistas rentabilizan la cultura en beneficio de una minorĆa mientras descuidan nuestro Patrimonio ArqueolĆ³gico, a nuestros artistas contemporĆ”neos y consecuentemente a nuestra Historia. Se trata de una mala praxis que supondrĆ” el Fin del Arte.