Respetando los gustos del cliente y la imagen actual de la marca, para no hacer un cambio rotundo de la misma, se llevó a cabo un logo con cierto estilo vintage o colonial que a la vez representa la escencia de Piera.

La tipografía es muy legible, la combinación transmite dinamismo (una parte informal y otra con mayor presencia y prestigio). En un segundo plano se puede observar un dibujo del Castillo de Piera, que también se adecua con otros logos utilizados por el municipio y de esta forma se incrementa el sentido de pertenencia.

El contorno interior del hexágono se une al dibujo, connotando así la comunicación; además, todo el conjunto da el sentido de unión.

Se utilizó un hexágono como forma contenedora ya que Piera deriva del latín “apiarium” que significa “Colmenar”.

Como resultado final se llegó a un signo identificador con gran carga semántica, de fácil reconocimiento y lectura, y por sobre todo, apto para todo tipo de público.

Es monocromático, la parte interior tiene una opacidad menor a la principal, por lo que se puede cambiar de color para adaptarlo a las distintas situaciones comunicacionales, además de darle mayor dinamicidad a la marca.