“Recuerdos de un olvido: retratos de aquellos que no vemos” se plantea como un ejercicio de percepción documentada de la feria Pinto de la ciudad de Temuco, espacio que surge a finales del siglo XIX producto del primer plan regulador proyectado para dicha ciudad.
Este proyecto tiene como foco visualizar y poner en valor a aquellas personas de la feria que han sido dejadas fuera de la imagen –imagen pública, imagen turística, imagen histórica– en pro de realzar el carácter heterogéneo y “de encuentro” social que caracteriza a esta particular parte de la ciudad. Constituido por alrededor de 40 fotografías en blanco y negro de diversos formatos que ponen atención no solo a los agentes que definen a este espacio como “mercado” –en la acepción económica de la palabra–, compradores y vendedores, sino que también a todos aquellos que “olvidamos” o que simplemente “no vemos”
