El café vuelve a enfriarse en la mesa.
El bolígrafo canta la misma canción.
Mis manos tiemblan, no atinan a nada.
Me dejaste la soledad doblada
en todos los cajones.
El bolígrafo canta la misma canción.
Mis manos tiemblan, no atinan a nada.
Me dejaste la soledad doblada
en todos los cajones.