Viernes 

Mañana quiero ir a la plaza, dije.
Tantas veces quise ir; pero siempre dudada 
Tantas veces me creé la historia, pero me faltaba impulso y coraje
Tantas veces hasta que un día con lágrimas no visibles en los ojos dije: mañana voy, necesito ir y era así, tenía como un hueco mas grande donde va mi corazón.
No hacía el mejor clima
La luz no era la que esperaba, pero ahí yo estaba
Las nubes grises y blancas, ellas me acompañaban
Siempre querré ir a las plazas de mercado
Estas tienen un perfume a nostalgia y melancolía
Estas me recuerdan la niña que fui
Estas me muestran la realidad de cada lugar
Estas me estallan la cabeza y el corazón
Mis ojos son mil cámaras y mi piel es seducida
Los colores, la luz al interior, las entradas de luz, su gente, su olor, su clima entre cálido y frío, entre lluvia y tierra; las plazas claramente me recuerdan mi niñez,
El sabor del batido de los domingos, esa mezcla color curuba que no es hecha de curuba, hoy allí pregunté, ¿eso es a base de qué?
Eso es a base de encanto, helado, esencia, azúcar y licuado. Es adrenalina.
Salí de allí con mi cámara al cuello y una mochila con una bolsa de papa en la espalda, salí de allí sintiéndome grande pero a la vez transparente, el pánico y el delirio de persecución no aparecía, aquel carro azul, aquellas sombrillas de colores, ese olor a pescado fresco y los gritos agradables de los vendedores, caminé y ella, mi mamá, mientras cargaba un montón de cosas se creía mi escolta, mi cámara era nuestra arma protectora, pues apenas la guardé me inundó el miedo, miedo que en realidad era una sonrisa de emoción.
Hoy fue un día de "scouting"
Hoy fue un día en el que me aventuré sin esperar nada, pero sabiendo que algo pasaría
Hoy fue un día en el que desafié muchas cosas
Gracias mamá; y a mi bisabuelo Pedro: hoy te recuerdo más que siempre.

 

Diana Dulcey

Viernes 16 de Octubre 2015