La Secretaría de Inclusión Social de El Salvador a raíz de estudiar sucesos dentro de las instituciones educativas públicas de nivel básico detectó la necesidad de fomentar una cultura que prevenga el abuso infantil a nivel escolar. Junto a un equipo multidisciplinario se desarrolló una estrategia comunicacional que lograra posicionar el concepto “Bullying” y también se hizo el llamado a adolescentes, jóvenes y adultos salvadoreños para que sean agentes preventivos de esta conductas antisociales.