Las llamadas “ciudades globales” tienen un efecto directo y tangible en los asuntos mundiales a través de algo más que el medio socio-económico, con influencia en la cultura o la política. Las ciudades más grandes y mejor interconectadas del mundo, ayudan a establecer los programas mundiales, están en condiciones de enfrentar los peligros transnacionales y sirven como centros de integración mundial. Ellas son los motores del crecimiento para sus países y la puertas de acceso a los recursos de sus regiones. Nuestra necesidad de mejorar nuestra comprensión de estas ciudades, es por lo tanto, uno de los objetivos fundamentales de esta Feria.

 

La Feria quiere también ofrecer al ciudadano cosmopolita, verdadero protagonista de estos cambios, alternativas, soluciones, servicios, infraestructuras y recursos. El cambio de siglo ha modificado el actual concepto de ciudadanía y cosmopolitismo modificado los hábitos, conductas y ritos propiciando un nuevo ciudadano globalizado que trata de adaptarse a las exigencias de las nuevas las prácticas ciudadanas postcapitalistas del siglo XXI. En ese contexto han aparecido una nueva generación de asociaciones, redes sociales, artistas y pequeñas empresas de corte civil que vienen a dar servicios y a responder a las exigencias de una sociedad cada vez más global.