Para la definición del concepto de diseño fue crucial la participación de Viviana Monsalve, quien identificó la oportunidad de usar formas con mucho carácter para representar la personalidad y los valores de la institución.
Algunos bocetos de la subfamilia serif plantean la necesidad de una familia con variedad de pesos.
El diseño de los números, inicialmente de estilo antiguo, recoge parte de la tradición universitaria.
El diseño de las itálicas terminó inspirándose en el ductus de la pluma cuadrada. Esto permitió aumentar las contraformas externas al mismo tiempo que producir un mayor parecido con el referente caligráfico
Inicialmente, las cursivas presentaban conexiones francas, que producían contraformas reducidas y no se relacionaban suficientemente con el referente caligráfico.
Fueron necesarias numerosas correcciones, perceptibles solamente en las pruebas impresas.
Los caracteres griegos, diseño de Julián Moncada, interpretan la rigidez del diseño original en un sistema de escritura cursivo en sus mayúsculas y formal en sus mayúsculas.
