Se puede apreciar las imágenes referenciales, para poder guiarnos con más seguridad sobre lo que desea el cliente.
Se opto por una paleta de colores neutros, realzada por toques de rosa y verde para reflejar la personalidad vibrante de la propietaria. La selección de mobiliario y accesorios abraza la estética artesanal y materiales naturales, incorporando elementos únicos que cuentan historias.
El dormitorio se sumerge en una paleta de colores neutros, resaltando la serenidad y la calma. La inclusión del color rosado y verde agrega un toque de vitalidad y frescura, equilibrando perfectamente la atmósfera del espacio. La fusión de estos tonos crea una armonía visual que se alinea con la personalidad vibrante de la propietaria.
En este proyecto de diseño de interiores, colaboré con una joven de 24 años que buscaba transformar su dormitorio. Inspiradas por el estilo Wabi Sabi, creamos un espacio que fusiona la elegancia de lo simple con la belleza de la imperfección.
