Existen diversas similitudes entre la arquitectura de Bogotá de la década de los 60 y la escuela Bauhaus. Entre estas se destacan carácter expansionista, la manera en que resaltan los materiales a través de sus obras, entre otras. El edificio el Refugio y en general la arquitectura de Guillermo Bermúdez, es ícono de esta arquitectura moderna en Bogotá. Ya descrito por Mejía Clavijo, los edificios de Bermúdez poseen una envolvente que caracterizan a cada uno de sus edificios. Ésta en particular permite a los habitantes del edificio tener una gran perspectiva de la ciudad gracias a sus ventanas corridas. Sin embargo, desde la perspectiva del peatón, el edificio es casi impenetrable ya que sus accesos no tienen tanto protagonismo en la fachada y posee hacia la calle un muro ciego de doble altura. Así pues, se puede comparar esta envolvente con una tela que recubre el edificio y le da distintas características por un lado y por otro. De manera similar, Annie Albers, quien fue profesora de la Bauhaus, como diseñadora textil desarrolló un tejido que tenía propiedades diferentes hacia cada lado, por un lado, era insonoro y por el otro reflectante. Así pues, el diseño de fachada de Bermúdez se asimila a este tejido y a otras cualidades en general del trabajo de Albers. Sus patrones de diseño pueden asimilarse con los ejes reguladores de la fachada del proyecto, el contraste de luz y color en sus diseños reflejan un pensamiento similar en ambos autores.
