Trabajo Editorial
Diseño experimental basado en un cuento. Texto y fotografías de creación propia.
Diseño Gráfico III Cátedra Rico FADU
La región del olvido
En la región del olvido las cosas están estancadas. No hay colores ni sonidos, y siempre es el mismo día. Todo es añoranza y ganas de volver. Es como un enorme campo sin fin en donde nada ocurre. Las personas que viven allí se quejan del aburrimiento y de la cantidad de seres, objetos, aromas, situaciones que reciben cada día, cada segundo. Es sorprendente todo lo que cabe en la región del olvido: años de vida de muchas vidas distintas. Por eso, en la región del olvido todo es desorden, soledad y pasa lento.
Las personas tienen otras profesiones y han adquirido otro modo de ser de quienes eran antes de entrar a la región. La mayoría duerme. Muchos se adaptan a esta situación, pero algunos lloran, otros se miran en silencio. Si se quedan juntos, lo hacen como ajenos, en otra cosa y se miran como visitas lejanas. Como si en otra región hubiesen sido tan distintos que ya no se reconocen los unos a los otros. Y todo lo que han peleado, hablado, comido, reído pasa al olvido. En la región del olvido las horas pasan como si fuesen eternas o ilimitadas, mejor dicho, porque el tiempo no existe allí. A veces parece estancado como todo, y otras como si corriese a miles de kilómetros por hora. Así es la región, va y viene.
La primera vez que la conocí estaba dormida, porque claro, de la única forma que se llega a ella es a través de los sueños. Por eso es difícil saber si de verdad existe. Mi experiencia fue de lo más real que viví, aunque también de las peores. Las personas son como fantasmas, no hablan y tienen mala cara. Caminan lento y sin gracia. Después de mucho tiempo supe por qué: tienen miedo de ser olvidadas. Si esa región se mantiene es gracias a los recuerdos de cada uno de nosotros. Mi región del olvido contiene todo eso que aún guardo en mi memoria pero que de a poco se va esfumando. A veces ocurre de un día para el otro y ya no me encuentro con ciertas personas, cosas, aromas o situaciones que aparecían antes. Entonces entiendo por qué: ya los olvidé.
Mi región del olvido contiene todo eso que aún guardo en mi memoria pero que de a poco se va esfumando. A veces ocurre de un día para el otro y ya no me encuentro con ciertas personas, cosas, aromas o situaciones que aparecían antes. Entonces entiendo por qué: ya los olvidé.
