El Impacto ambiental de los Salones de Belleza
Acciones de innovación social para la reducción de riesgo en la CDMX.
El negocio de los salones de belleza en México ha evolucionado y se ha expandido rápidamente en los últimos años por el gran beneficio económico y la demanda social por preservar su belleza, sin embargo, este desarrollo ha traído con él implicaciones negativas que afectan a la sociedad. En México existen 181,488 salones de belleza (INEGI,2018), los cuales se han diversificado y ofrecen servicios de: corte, tinte, maquillaje y tratamientos para el cabello; cremas faciales, productos para depilar, aceites para masajes; venta de productos, nuevas sustancias para impedir o atacar el paso del tiempo o el sobrepeso; cirugías plásticas para retocar el cuerpo, etc.; esto y más constituye la industria de la belleza; pero ¿cuántos de estos productos se usan constantemente?, ¿cuánto tiempo dedican las personas al cuidado personal? ¿qué concepto se tiene de belleza? ¿existen riesgos de salud?
De acuerdo con datos de Expo Beauty (evento anual de belleza en México), tanto hombres como mujeres invierten a nivel mundial 15 mil MDD en la compra de productos de belleza. Los mexicanos gastan entre 600 y 2,000 pesos mensuales en salud y belleza; 45% de las mujeres dedica al día 19 min. en promedio al cuidado personal, invirtiendo entre 50 o 60% de sus ingresos, lo que representa de 500 pesos (niveles socioeconómicos bajos) hasta 40 mil pesos (niveles socioeconómicos altos) en cosméticos, tratamientos, spas, cirujías y otros. Ulloa, A. (2006).
Este tema no es baladí y apunta a una problemática urbana, motivada por un vínculo crítico y testimonial con el entorno cotidiano, debemos tener presente que en México se registran aproximadamente un millón de clientes diarios en salones de belleza, que consumen 8 millones de m3 de agua anuales y 600.000 MWh de electricidad, de los cuales, el 80% se debe al secado del cabello.1
Y que generan diferentes tipos de residuos: tubos de tintes, lacas, esmaltes, aluminio, químicos, etc. Los residuos peligrosos no controlados en México se encuentran al alcance de la población; este hecho, más que una problemática de contaminación ambiental, constituye un severo riesgo para la salud pública Tal y como comenta el presidente de las Instituciones de Peluquerías francesas L’OREAL, Jean Paul Agon, “cortar el pelo nunca fue una actividad contaminante, pero con un millón de clientes diarios, esto representa un conjunto de pequeñas fuentes de contaminación y por lo tanto, se convierte en un reto”.
1 Fuentes, B. (2011), Dinámica del sector servicios en el 2011 y sus perspectivas.
Propuesta
Esta propuesta gira en torno a cuatro temas centrales que desencadenan los objetivos y ejes para dar enfoque a las soluciones y estudios de salones de belleza a través del diseño y la innovación social: 1) Servicios y procesos: La práctica del estilismo/estilista; 2) Productos y residuos: los productos utilizados (envases, químicos y sus desechos); 3) Espacio y normas: el discurso usuario - espacio - ambiente - regulaciones; y por último 4) moda, sociedad y educación: el concepto de belleza. Se cree que estos cuatro temas abarcan la complejidad de la problemática y los papeles que juegan sus diferentes actores: los estilistas, los gestores y promotores de belleza, las industrias, la publicidad, los usuarios y las personas que deciden las políticas y regulaciones. Y darán un eje para siguientes investigaciones e interesados en el tema. Los temas provienen del reconocimiento de la actividad peluquera como dinámica, cuyos métodos, productos, ambiente y discursos son interactivos y cambian constantemente adaptándose a la moda. Por lo tanto, se incita a la discusión pública sobre lo que se necesita en la sociedad y a los investigadores a ser capaces de producir conceptos y prototipos de productos, sistemas, servicios y nuevos medios que puedan ser socialmente útiles.
