De los registros de las vacaciones que con mi familia realizamos en 2013 al Sur de Chile, llegamos al pueblo de Quicavi, tras instalarnos por un mes en esas tierras logre conocer a un grupo de jóvenes que se dedicaban al movimiento de sacos de luga.
La luga es una alga altamente cotizada internacionalmente, para producir cosméticos, es por eso que la recolección de esta alga en las costas de Chiloé se ha vuelto una actividad primordial para muchas familias y su explotación produce el movimiento de grandes toneladas.
En el puerto de Quicavi constantemente llegan barcos de los archipiélagos cercanos transportando esta alga para sacarlos fuera de la Isla. Estas toneladas son cargadas por estos Jóvenes y que diariamente en un grupo que no supera los 10 muchachos deben cargar un camión con 11 toneladas de Algas.
La luga es una alga altamente cotizada internacionalmente, para producir cosméticos, es por eso que la recolección de esta alga en las costas de Chiloé se ha vuelto una actividad primordial para muchas familias y su explotación produce el movimiento de grandes toneladas.
En el puerto de Quicavi constantemente llegan barcos de los archipiélagos cercanos transportando esta alga para sacarlos fuera de la Isla. Estas toneladas son cargadas por estos Jóvenes y que diariamente en un grupo que no supera los 10 muchachos deben cargar un camión con 11 toneladas de Algas.
Transformar este registro en pinturas, responde a tres cosas:
1. El descubrimiento de una realidad totalmente diferente a las mecánicas sociales que se pueden encontrar en otras ciudades mas populosas. Sobre todo al hecho de lo consiente que eran los jóvenes de sus propias realidades "ellos elegían quedarse en la isla y trabajar en la carga, preferían vivir en calma que ir a la ciudad"
2. Mi admiración por la entereza física que habían logrado sobre si mismos, y también por su experiencia en campos que me parecían tan ajenos.
3. Una forma de mantener a través del proceso de la pintura, el recuerdo de la camaradería entregada.
