Siendo que el 86% de  las trabajadoras sexuales son madres, necesitan una ley que las proteja de la explotación y la violencia policial para mantener a su familia y trabajar en libertad. Como para la sociedad y la justicia e incluso para los medios este tema es tan controversial , todavía pasa desapercibido. En este sentido, se ideó una acción en diferentes esquinas de la ciudad. Las esquinas son lugares emblemáticos donde las trabajadoras sexuales ofrecen sus servicios. Allí, se instaló una pieza de arte urbano en la cual de un lado el peatón puede ver la realidad de una trabajadora sexual que más conoce -el ejercicio de la prostitución- y del otro lado, la que aún desconoce, su maternidad.
 
La piezas pueden ser descargadas para ser difundidas en las paredes de los barrios en: mamasdelaesquina.org