Malestorm
Oil Paint on canvas
Oil Paint on canvas
Definitivamente el color que representa de alguna manera todo el conglomerado de situaciones que ocurrieron en estos años, pero particularmente este año, sin duda alguna seria el rojo. Me gusta la connotación que tiene el rojo, expresa en cierto sentido algo voraz y vivo como el fuego, y que del mismo modo lleva inmerso esa naturalidad de “quemar“ que tiene. Porque si bien este año hubo un incendio, y se quemaron un montón de cosas, y al final lo único que queda es la ceniza. Y de golpe entre todas esas cosas que se quemaron hubo muchas que no recuerdo, pero se que se quemaron porque veo esa ceniza, pero por mas que se trate de analizarla es imposible que sepas de que proviene. Pero ahí esta esa ceniza y es de ella de la cual volvió a nacer el Fenix. Por otro lado, el rojo tiene esa personalidad violenta, que puede representar el hecho de haber estado en situaciones de peligro y de haber derramado sangre. En sentido figurado obviamente, porque de algún modo este año fue de muchos golpazos. Hubo muchas situaciones de error, pero que notablemente te llevan a un estado de aprendizaje que no hubiese sido posible bajo otras circunstancias. Es irónico podría decir, el hecho de que tengas que cometer errores para poder aprender, algo parecido a lo que ocurre con los niños, por eso digo a veces que el que deja de ser niño de algún modo esta muriendo. Porque si bien es cierto, el que no aprende no evoluciona y el que no evoluciona esta destinado a vivir en el parque jurasico. Por otra parte ese peligro del que hablaba hace unas líneas, es el que de algún modo te permite ver otros horizontes, y no solo eso, el hecho de verse involucrado en situaciones de peligro te lleva a tomar decisiones que bajo circunstancias de comodidad no hubiesen podido ser llevadas a cabo, así que de algún modo el universo en ciertas ocasiones se confabula para que las cosas tengan que ocurrir, y ahí es donde aparecen esos focos de luz que parecen perderse en ese torbellino rojo, pero que al final le roban su protagonismo. Y a veces hay que hacer a un lado esa idea absurda de creer que uno puede controlarlo todo, cuando estas en un remolino dando vueltas hay cosas que son imposibles de controlar y entre menos energía invirtamos en ello va a ser mejor. Las cosas ocurren cuando simplemente una serie de causas se alinean de tal forma que una consecuencia producto de las mismas resulta ser algo inevitable. Y la paciencia juega un papel fundamental, muchas veces esos remolinos te tragan simplemente por no conservar la calma. La cuestión está en tomar decisiones en los momentos adecuados y esperar a que la suerte juegue su papel. Algo así como el poker, la vida en ultimas resulta siendo eso: un juego de poker.
