El proceso de mi pintura a lo largo del tiempo
Todo lo que ocurre en mis pinturas se desarrolla casi de manera fluida; como un médium entre mis manos y este plano terrenal. Aprovechando las fuerzas naturales, algo baja encriptado.
Son como los mensajeros que vienen a contarme una historia oculta, que voy descubriendo etapa por etapa.
Abrir una frecuencia con el espectador y hasta provocarlo, ya sea con la forma, el color o lo gestual, invitándolo a veces a una cierta incomodidad, una búsqueda interna. Sin más, su propia interpretación.
Las series:
En la inversión de la crueldad, hay un grito abierto y tempestivo al maltrato animal y un aporte a la abolición de esa práctica cultural indignante, indigesta y abominable. Donde hay también una lectura caótica, sangrienta y violenta. Trabajé en formatos exageradamente grandes para simbolizar esta temática utilizando pintura al óleo sobre lienzo.
En el corto estudio de aves simbolizo la experiencia de la observación, mensajeras de historias remotas, viajes oníricos; simbolizando un nuevo despertar, también en grande formato utilizando como técnica pintura al óleo sobre lienzo.
En este último tiempo la naturaleza es el centro de mis expresiones, donde la flora y el simbolismo ha sido la interpretación narrativa de mis cuadros, aflorando con una doble lectura, primero accediendo por un portal estético, atrayente, enigmático, donde la fuerza del color seduce de primera vista. La composición equilibra en ese aparente desorden. En una segunda lectura que es más profunda, simbólica, hermética y esotérica, todo converge a un espacio encriptado.
Detrás de las flores se esconden situaciones, emociones, etc. No son solo flores como se puede ver a primera vista.
Normalmente de una lectura compleja: caótica porque hay mucha información, pero ordenada en cuanto a la composición que deja entrar poco a poco el ojo curioso del espectador entre las numerosas capas y entre-capas que se van forjando en esos mundos.
En este caso utilizo papel de 300 gr de pequeño formato; aprovecho todo el material: tintas, óleo pastel en ocasiones, lápices tiza, plumas de caligrafía de distintos tipos que me sirven para re-definir, dibujar, crear texturas y firmar mis obras.
Mi numen surge como germinaciones espontaneas de la intensidad de mi
hondo ser; de cada célula que habito, de la naturaleza y todo lo que existe en ella.
Me inspiro de muchas fuentes: la música, la lectura, mi fotografía con una estética propia, la naturaleza vibrante, mis amigos, la flora, la fauna, las historias populares, los viajes, la arquitectura, los paisajes y el folklore que rodea a estos. Y el amor, un ingrediente indispensable.
Mis emociones y lo que ocurre a mi alrededor están íntimamente ligados a mis pinturas.
El proceso de creación de mi trabajo es simplemente simbolizar parte de las historias que emergen de mundos diferentes; en nuestros encuentros y ofrecer actos gestuales como ritual.
Es de suma importancia, reivindicar esos actos gestuales concretarlos en expresiones para re-conectarnos con las raíces de nuestras identidades; para recordar quienes somos como comunidad y a donde vamos.
El color sale intensamente como expresión pura de mi espíritu reflejando un sin fin de mundos.
La intensidad de las formas creadas por el color, las líneas, las transparencias, la extravagancia del color, el gesto ofreciendo-lo como una ofrenda divina abre una frecuencia emocional diferente en cada espectador.
No hay mayor estímulo para mí que las inagotables maravillas de la naturaleza, la necesidad de escuchar, sentir, tocar, fluir. Es una bendición ser parte de este proceso en este mundo natural, del cual me nutro en abundancia en esta travesía sin fronteras.
No olvides que la tierra se deleita en sentir tus pies descalzos
y los vientos anhelan jugar con tu cabello.
- Khalil Gibran -
