La memoria registra nuestras experiencias y el pasado. Esta facultad es en sí misma una colección de recuerdos, la cual puede ser rescatada a través de elementos valiosos como la fotografía. Este medio facilita la recordación en la medida en que es tangible y permite una cómoda conexión con el momento que se pretende revivir. Las fotografías son objetos preciosos para quien las guarda, pues por el vínculo existente con esas imágenes tienen la posibilidad de entender y rememorar vivencias, detalles y sucesos significativos. Es un método por medio del cual se puede reconocer y reconstruir a sí mismo a través del pasado y establecer una relación con su entorno. En este proyecto se busca desfragmentar la memoria mediante un juego de imágenes, concibiendo una serie nueva en la cual se establece un diálogo entre pasado y presente a partir de fotografías de tres mujeres que encarnan generaciones distintas, y así, conformar composiciones de singulares características que reflejan la imagen fragmentada de la memoria en el tiempo, utilizando un diseño tipo rompecabezas, que genera una conexión con el espectador frente al rol que juegan las protagonistas en la creación de la memoria visual de una época.